Moon, la esperada película de Duncan Jones en la que Sam Rockwell vive un proceso de “se me va la pinza” en el papel de un astronauta durante sus dos últimas semanas en la base lunar Selene, controlada por AI (sí, inteligencia artificial), que empieza a sufrir alucinaciones y a escuchar cosas extrañas.
Suena a 2001 revisionada, y posiblemente sea cierto, pero casi todo el mundo reconoce que es de lo mejorcito que se ha hecho en este tipo de ciencia ficción en años y que Sam Rockwell por fin puede dar el gran salto de reconocimiento que le faltaba en su carrera, que aunque sólida, casi siempre ha estado plagada de secundarios que no han permitido que cuaje como el gran actor que es.
Fuente: lashorasperdidas.com
Pd: Quillo.. lo se, aceptame como soi xD
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