Lo peor que puedes hacer nada más levantarte, es tropezar. Así condenas al resto del día a transcurrir con absurdos trompicones. Han pasado casi dos meses. Todo sigue igual pero de manera muy distinta. El móvil ha perdido su importancia, duermo muy bien (incluso diría que con demasiada profundidad) y mi cabeza compite por una multitud de pensamientos, no solo gira entorno a uno. Hay mañanas en las que el mundo se me queda grande y otras en las que me resulta excesivamente pequeño. Días en los que parece el primero de algo y días sencillos que sólo son uno de tantos. Sea como sea lo importante es continuar y utilizar cada momento al máximo. Da igual que estemos durmiendo, que viendo la tele, que riendo, que estudiando. Es nuestro tiempo, un regalo personal e intransferible que se otorga al nacer por nuestra cara bonita. Por eso hagamos lo que hagamos, lo valoremos o no, lo disfrutemos o lo perdamos, cada segundo… cuenta.
5 comentarios:
10 puntos para juliette. muy wenoasi si da gusto entrar en el blog
Gracias!! Así da gusto escribir en el blog! &;-)
muy bonito y cierto juliette
me ha gustado mucho
coincido contigo en que empezar el dia tropenzando es lo peor...
te has planteado que es mejor caerse de golpe, para levantarte y ya el día seguir en pie....
besos!!
Pues no me lo he planteado pero... me gusta tu visión!
mmmmmmmmm lo mio es fácil: amanece, toma café, que siempre apetece!!!
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