- Que sí Jimmy, que sí. En esta ciudad, además de garitos y bares hay muchas cosas para hacer...- Podemos visitar a los de AZCA si quieres, que están acampados en pleno centro financiero de Madrid. Y les preguntamos por las virtudes de la ciudad. Ya me dirás tú. ¿Con la cartera tiritando a donde vamos a ir? Si es que te cobran hasta por respirar.
- Ahí tienes razón, pero podemos buscar algo alternativo...
- ¿Alternativo?
- Mira, el otro día estuve en el Andén 0, en la estación de metro de Chamberí...
- De eso ya he hablado, Gordon.
- Pero hace mucho.
- ... Esta ciudad se acaba, machote.
- ¿Por qué no una cosa contra los Juegos Olímpicos?
- No estoy en contra. Me gustaría que se celebrasen aquí.
- ¿De la debacle madridista?
- Estoy harto, Gordon. Todo el mundo habla de lo mismo, todos vamos a los mismos bares cuando salimos. Esta ciudad se acaba, Gordon...
- ¡Lo tengo!
- ¿Qué tienes? ¡Solo tienes ideas absurdas, descabelladas, insulsas! Además, ¡quieres dejar de una vez mi puto ordenador! ¡Desde que lo tocas funciona mal, se conecta mal, desde que estás aquí, todo está mal! ¡Gordon, no me ayudes más! ¡Déjame solo, quieres!
Gordon, cansado de mi mal humor de lunes, hastiado de mis malas contestaciones, quitó lentamente las manos del teclado, se levantó cabizbajo, cogió una cerveza de la nevera y sin mirarme a la cara se marchó.
No soporto que me lleven la contraria si no me he tomado un café, por la mañana. No soporto que la gente llegue tarde. No soporto que se crean que uno es gracioso todo el día, ni que debe de serlo.
Pasaron un par de horas desde el incidente. Caminé varias veces el pasillo de casa, recoloqué un par de cuadros torcidos del salón, repasé como un autómata tres o cuatro veces la encimera con un paño seco, y fumé cuatro o cinco pitillos, uno detrás de otro.
Entonces, me senté en el despacho, y descubrí en el monitor de mi clónico una web seleccionada: Carpetania Madrid. Entendí la cara baja de Gordon, mi salida histérica y fuera de tono desbordó el vaso.
Él tenía razón, esta página es para dedicarle un post, porque nos ofrece una buena alternativa al cerveceo, que está muy bien, pero que a veces cansa (sobre todo al hígado y al bolsillo).
Podremos encontrar paseos guiados que van desde el Madrid de Luces de Bohemia, al Madrid terrorífico y misterioso, por la Gran vía, pasando por guías especificas de los barrios más castizos de la capital, hasta un buen paseo castizo basado en las obras de Ramón Gómez de la Serna y entre otras, 'La Nardo'.
Gordon se ha marchado. No coge el teléfono, y supongo que el mosqueo le durará unos días.
Uno nunca sabe las amistades que tiene, hasta que las pierde.
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