Suena de camino a Mazarrón...
Sin esa canción no se puede entender las siguientes fotos...
Los niños corren a tomar un batido mientras yo leo Las dos torres de nuevo...
- ¿Por qué lees ese libro? - pregunta David mientras apura su arroz con leche.
- Porque es El señor de los anillos y tenía muchas ganas de leerlo de nuevo - le contesto yo.
- Pues te estás perdiendo las buenas cosas de la vida - asevera David.
- ¿Cómo?
- Sí, estamos en la playa y estás leyendo en vez de estar construyendo castillitos en la arena o nadando en el mar. Estás perdiendote los buenos momentos de la vida - repite mi hermano de seis años.
Ya en el coche de vuelta relato tal conversación mientras suena de nuevo "A mi manera" de Siempre así y mi madre no puede reprimir unas lágrimas que llevaban un tiempo cayendo. Mientras yo hacia estas fotos ella había lamentado que dentro de nada me iré, maduraré y tendré una vida hecha con Cristina... Seguro que está orgullosa de que lo haré, o lo estoy haciendo, a mi manera, pero ella no tendrá más a su primogénito en casa.
Sin esa canción no se puede entender las siguientes fotos...
Los niños corren a tomar un batido mientras yo leo Las dos torres de nuevo...
- ¿Por qué lees ese libro? - pregunta David mientras apura su arroz con leche.
- Porque es El señor de los anillos y tenía muchas ganas de leerlo de nuevo - le contesto yo.
- Pues te estás perdiendo las buenas cosas de la vida - asevera David.
- ¿Cómo?
- Sí, estamos en la playa y estás leyendo en vez de estar construyendo castillitos en la arena o nadando en el mar. Estás perdiendote los buenos momentos de la vida - repite mi hermano de seis años.
Ya en el coche de vuelta relato tal conversación mientras suena de nuevo "A mi manera" de Siempre así y mi madre no puede reprimir unas lágrimas que llevaban un tiempo cayendo. Mientras yo hacia estas fotos ella había lamentado que dentro de nada me iré, maduraré y tendré una vida hecha con Cristina... Seguro que está orgullosa de que lo haré, o lo estoy haciendo, a mi manera, pero ella no tendrá más a su primogénito en casa.
3 comentarios:
envidia
Ohhhh... a mí lo que me sigue dando evidia es la playa... :-(
jajajajajaja
playukiiiiiiiiii
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